Skip to main content

Diputación de Burgos

Danzantes de Rabanera del Pinar


se celebra el 29 de agosto, que es San Juan Degollado; ese día se bailan las danzas típicas de paloteo y cintilla; el paloteo se celebraba en la iglesia el Domingo de Carnaval y sus principales elementos son “El trenzado” y “El Menudito”. Los danzantes de Rabanera han participado entre otras exhibiciones en la XVII Muestra de Danzantes y Danzadores. La Danza de Paloteos es un baile que se practica especialmente en esta zona del norte de Burgos, es un baile elegante que se baila por parejas pero con una misma coreografía y que conjuntamente van formando una rueda. Comienza con el redoble del tambor y seguidamente el dulzainero lanza sus notas. Poco a poco el ritmo de la rueda se aligera pero nunca de manera excesiva, de manera que forma un baile muy vistoso y alegre.

El Colacho


la ceremonia «bautismal» en la que el demonio salta sobre bebés; una vez al año a mediados de junio, el demonio corre libre en el municipio de Castrillo de Murcia.

El festival de El Colacho, que mezcla ritos paganos y católicos y representa el triunfo del bien sobre el mal, se remonta a 1620 y tiene lugar en el domingo después de la festividad del Corpus Christi. Sus orígenes no están del todo claros, pero algunos historiadores creen que podría haber comenzado como ritual de la fertilidad. Durante el festival, los «demonios» de máscaras rojas y amarillas corren por las calles profiriendo insultos contra los aldeanos y dándoles latigazos con una cola de caballo atada a una vara. Cuando los tambores anuncian la llegada del atabalero vestido de negro y con él aparecen los hombres devotos para expulsar al mal, da comienzo el salto del Colacho.

Durante esta exhibición, los bebés que han nacido durante el año anterior se colocan sobre un colchón en la calle mientras los hombres disfrazados saltan sobre ellos. Como si fuera una especie de bautismo, se cree que el demonio absorbe los pecados de los bebés y les proporciona protección frente a las enfermedades y las desgracias. Los espectadores que llenan las calles también regañan al Colacho para evitar su propia mala suerte el año siguiente. Después, se echa sobre los bebés unos pétalos de rosa y sus padres los recogen de inmediato.

Fiesta del Capitán de Frías


Se celebra el domingo más cercano al 24 de junio, la noche de San Juan, en el municipio de Frías.

El 12 de mayo de 1435 el rey Juan II concede a Frías el Título de “Ciudad” pero el 12 de agosto de 1446 cambia al reinado del Conde de Haro que toma posesión del pueblo por un Portillo del pueblo, el conde sube los impuestos y se gana la enemistad del pueblo que nombra a un joven aguerrido y valiente que dirige la guerra contra el Conde. Ese nombramiento y el recuerdo de aquel asedio es el motivo de la celebración de la fiesta del Capitán. Esta fiesta se viene celebrando con mucha rigurosidad desde los mismos tiempos del acontecimiento, por ordenanza municipal (ordenanza nº 43, año 1481), el 24 de Junio.

Ahora en la actualidad y ya de vísperas se reúnen en la Calle del Mercado los danzadores, que tras un solemne baile y acompañados por toda la ciudad, se dirigen hacia el Ayuntamiento bailando por toda la calle la tradicional danza de San Juan. Una vez en el Ayuntamiento se recoge la bandera y la comitiva se dirige hacia el castillo donde se procederá al nombramiento del Capitán, tras el revoloteo de la bandera realizado por los aspirantes a ello.

Cronicón de Oña


Se celebra el fin de semana del 15 de agosto en la Iglesia de San Salvador, a través de un espectáculo que narra la historia del pueblo de Oña.

El origen de la fiesta está en que, siguiendo las costumbres de otros núcleos urbanos, un grupo de ciudadanos de Oña tuvieron la idea de escenificar la historia, principalmente de los siglos XI y XII, y con ello, otros históricos pasajes que, con el devenir de los tiempos, tuvieron trascendentales repercusiones a nivel nacional.  El monasterio de la villa de Oña, tiene entre otros méritos históricos, artísticos, culturales, y arquitectónicos un conjunto funerario, con ocho sepulcros, donde están enterrados reyes, infantes, condes, obispos, princesas… que, en el transcurrir de los tiempos, y en diversos avatares de diferente tipo: bélicos, luchas fratricidas, combates contra el árabe invasor, alianzas diversas, etc., forjaron el reino de Castilla; muchos de los personajes, cuyas tumbas están en el monasterio, aparecen en escena.

Otros socios del proyecto